La carta
hace mucho que quería escribirte algo como lo que estoy
empezando a escribir ahora mismo, nunca lo hice porque nunca supe cómo hacerlo, las palabras a veces
salían de mi pero volvían al mismo sitio, al principio de todo.
porque nunca sabia
como expresar lo que siento nunca sabía si lo que quiero expresarte debía
hacerlo.
te veo tantas veces
pasear por las calles por el pueblo donde vivimos, hablar con tantas personas
que ambos conocemos, nos cruzamos, nos mirábamos, nos saludamos incluso hemos
cruzado alguna mirada furtiva y cómplice.
adoro las miradas cómplices
contigo esas miradas cuando todo lo que te rodea se detiene por unos segundos y
solo tu y yo entendemos lo que está pasando. seguro que ni siquiera te has dado
cuenta pero para mi esos segundos duran siglos.
me he acercado a ti
tantas veces como he podido solo para rozar el canto de tu mano, para poder
sentir tu piel, ojala hubieras podido notar como se erizaba la mía mientras te tocaba
sin que te dieras cuenta.
ojala hubieras
sentido como me he pegado a tu espalda mientras hablabas con alguien para notar
el olor de tu cabello.
eres tan distinta al resto, adoro como intentas pasar
desapercibida por el método del pavo real, muchas marcas para que se fijen en
todos los abalorios menos en lo que tú quieres que se fijen realmente...
te quiere, nadie